Real Madrid 1-1 (5-3) Atlético: Milán se vuelve blanco

El pasado sábado tuvo lugar el partido más importante de la temporada para Atlético y Real Madrid. Milán se vestía de gala para recibir la gran final de Champions League. Acabó haciendo historia el conjunto merengue, pero sufriendo hasta los penaltis.

El partido de ayer, fue algo jamás visto. Dos equipos, veintidós guerreros frente a frente y una Champions de por medio. El destino le debía una al conjunto rojiblanco, pero no pude ser. Se encontraron con un Madrid que defendió bien, compacto y consistente. El Atlético, tuvo que llevar el control del partido algo que en vez de hacer su juego mejor, lo debilita. Y así fue. Fue un partido en el que unos quisieron jugar al juego de los otros, y los otros al de los unos. Demasiado raro. Tanto como que el Atlético no había encajado gol a balón parado y tuvo que ser ayer el primero. 

El partido empezó con un dominio del Madrid y un Atlético agazapado atrás esperando el fallo para soltar el zarpazo. Lo que se preveía. Pero fue el héroe de Camas, el guerrero blanco, el gran Sergio Ramos quien volvió a quitarles la ilusión a los aficionados del Vicente Calderón. Falta que bota Toni Kroos que había marcado jugada directa a la cabeza de Gareth Bale que se había quedado para prolongar de cabeza hacia el interior del área. Tras el toque del 'Príncipe de Gales' el balón le queda a Sergio Ramos, que estira la pierna y roza lo mínimo la bola para marcarle de caño a Jan Oblak.

Eso sí, con polémica. El sevillano, estaba ligeramente en posición adelantada. Y de eso es de lo que se quejan los colchoneros. También hay que apuntar, que Savic le llevaba agarrando desde antes del saque de la falta, que supondría un penalti, pero bueno eso es otra situación. La cosa es que el gol subió al marcador. 

Los jugadores blancos tras el gol, empezaron a enfriarse y perdieron el control de la pelota por completo, dominando así el atlético desde el minuto 27. Los del Cholo gozaban de la posesión pero no tenían ideas para moverla. 

El primer contratiempo para el Real Madrid tuvo lugar con la lesión del canterano Dani Carvajal, que se retiró llorando. Entró en su lugar Danilo. Así trascurrieron los minutos hasta el pitido que indicaba el final de la primera parte. 

Ya en la segunda, el Madrid siguió con los contratiempos. Pepe cayó inocentemente en la trampa de Fernando Torres y cometió penalti sobre el delantero colchonero. El encargado de lanzar sería el máximo anotador del equipo, Griezmann. Le pudo la presión al delantero francés que quiso reventar al medio por arriba pero se le fue al larguero. El conjunto de Simeone, más allá de venirse abajo se envalentonó y dirigidos por un enorme Yannick Carrasco. En la jugada que pudo ser el definitivo 2-0, la suerte favoreció al Atlético y los pupilos del Cholo consiguieron empatar la gran final. Carrasco que hizo un partido espectacular celebró su gol de una manera preciosa, yendo a besar a su novia. 

Los dos equipos llegaron a la recta final fundidos. Pero había una diferencia el Cholo que había previsto el empate se guardó dos cambios para la prórroga y Zidane hizo los 3 que le correspondían antes de ésta. Pero no fue un impedimento, el Madrid se hizo con la bola y no dejó que los rojiblancos pudiesen meter más peligro. Pero ellos tampoco metieron miedo a Oblak. 

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Así llegamos al momento cúspide del partido. A los penaltis. Marcaba el Madrid, después el Atlético y así hasta el lanzamiento de Juanfran. ¡Vaya palo que se llevó el lateral! Estrelló la  bola en el poste y con la pelota los sueños del equipos. El "Nunca dejes de creer" se volvió en desolación. El sueño que perseguían se convirtió en pesadilla. Tenían su fe puesta en su portero, pero era Cristiano Ronaldo quien tiraba. Y no falló. 

El Madrid se llevó la undécima. El Atlético sigue esperando esa Champions que les debe el destino.


Redactado por Marco Osado (@