Tras el duro correctivo que ha sufrido el combinado español en Brasil todos los españoles no pueden dejar de hacerse preguntas a sí mismos, ¿qué ha pasado?, ¿qué hemos hecho mal?, ¿se acaba este ciclo? Ahora es turno de analizar todo lo sucedido y encontrar los fallos que nos han llevado a la eliminación. No se puede buscar a un solo culpable, ambas partes, tanto seleccionador como jugadores, han tenido fallos en ciertos aspectos.
Este Mundial hace plantearse a Vicente del Bosque su continuidad en el cargo de seleccionador nacional, cuestionado por su convocatoria, especialmente en el apartado de los delanteros ya que había muchas dudas en cuanto al rendimiento de Villa y Torres, que finalmente han cuajado un gran último partido, y se prefería llevar a Negredo y Llorente. Quizás el gran fallo en la convocatoria fue no llevar a Jesús Navas, un gran jugador de banda, rápido y capaz de dinamitar el partido en cualquier momento, y una gran baza para revolucionar el partido con su entrada al campo.
Otro tema de debate sobre las decisiones de del Bosque han sido sus alineaciones, antes de opinar aquí tienen los 3 once iniciales con los que ha salido España a jugar:
*Fe de erratas: En la 2ª alineación el lateral derecho titular fue Azpilicueta, y no Juanfran |
En el primer partido contra Holanda, en el que España sufrió un doloroso 1-5, la selección sale con los presumiblemente titulares, en el que jugadores como Xavi o Piqué forman parte del 11 de gala y no entran jugadores como Pedro u otro delantero, o Villa o Torres ya que existía la duda de que jugara Diego Costa por problemas físicos. Esta alineación no funciona y España pierde estrepitosamente y la mayoría de estos jugadores son cuestionados y se piden cambios en el siguiente partido contra Chile.
Tras la debacle contra Holanda el seleccionador decide realizar cambios en el once del que se caen Xavi y Piqué, grandes señalados en la derrota contra la selección holandesa, y se produce la entrada de Pedro y Javi Martínez y sorprende la decisión de no incluir a Koke, el cual jugó la segunda parte y fue de lo mejor de España. Diego Costa sigue siendo el delantero titular pero tampoco consigue cuajar un buen partido. España cae por 2-0 contra Chile, siendo eliminada y dando una muy mala imagen.
Llega el tercer y último partido de la selección en el Mundial, ya eliminados y sin nada en juego por lo que del Bosque decide realizar cambios en la alineación y dar entrada a jugadores que no han podido disfrutar de muchos minutos a lo largo del torneo, como Reina, Juanfran, Albiol, Koke, Cazorla, Torres y Villa mientras que se mantienen Sergio Ramos, Jordi Alba, Xabi Alonso e Iniesta. Casualmente, con los jugadores menos habituales España realiza su mejor partido en el Mundial y golea a Australia 3-0. Quizás esto hace ver que Vicente del Bosque debería haber hecho más cambios en las otras alineaciones, habiéndose equivocado al alinear a jugadores que no llegaban en su mejor momento, ya sea por la edad o por la forma física, como Xabi Alonso, Casillas, Xavi o Diego Costa.
Por su parte, los jugadores tampoco han estado acertados en este Mundial, no se apreciaba la intensidad que les ha llevado a conseguir todos los títulos y el estilo de juego no ayudaba, movían el balón muy lentamente y ante una defensa bien replegada como fueron las de Chile y Holanda no se encontraban los huecos que encontraban hace 4 años. Quizás el problema en los jugadores ha sido haber llegado a Brasil demasiado confiados y sin una concentración plena en el Mundial. Muchos jugadores han llegado a esta cita mundialista agotados físicamente por su edad o por lo larga que ha sido su temporada, y esto se apreciaba en las segundas partes de los partidos, en el que los rivales nos comían físicamente.
Obviamente al hablar de estos problemas nos referimos a los dos primeros partidos, en los que España dejó una muy mala imagen, que algo ha conseguido enmendar en el último partido, en el que se ha visto al equipo que consiguió alzarse con un Mundial y dos Eurocopas, con un juego alegre y vistoso, una rápida circulación de balón y una gran pegada, probablemente hayan desplegado este juego al no tener ya presión alguna, pero quién sabe a dónde habrían sido capaces de llegar estos jugadores si hubieran jugado igual que hoy. Lo que es casi seguro es que de haberlo hecho, hoy los 23 jugadores internacionales no estarían haciendo las maletas para comenzar sus vacaciones.
¿Necesita España una revolución? No. La respuesta es no, no hay que perder la cabeza y pedir un cambio total. Cierto es que algunos jugadores como Villa, Xavi, Xabi Alonso y quien sabe si Casillas, todos ellos pilares básicos de los éxitos de la selección, probablemente hayan jugado sus últimos partidos con la elástica roja, por lo que necesitan entrar jugadores jóvenes y con ganas de comerse el mundo de nuevo, y en esto España no tendrá un gran problema al verse los resultados cosechados por las categorías inferiores españolas, liderados por grandes jugadores que tendrán que hacerse hueco en el equipo como Jesé, Deulofeu, Íñigo Martínez y Bartra o Isco.
Respecto al estilo de juego todo está por ver, depende de varios factores como la continuidad de Vicente del Bosque o del estilo que prefiera su sustituto, del estilo que mejor se adapte a los jugadores... Pero no debemos olvidar que en el fútbol lo importante es ganar y eso debe anteponerse a si un estilo es más bonito o más feo.
Este Mundial no ha sido el de España, pero más que decepcionarnos debemos estar agradecidos a esta generación de futbolista únicos e irrepetibles que nos han regalado estos 6 años de buen fútbol y éxitos. Ahora toca levantarse y volver a construir un equipo que nos devuelva a la gloria del fútbol mundial.
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