Los Cleveland Cavaliers de LeBron James ganan la final de la NBA en el séptimo partido 93-89 a los Warriors de un Stephen Curry desaparecido.
1:09 para el final del partido. 89-89. Posesión para los Cavaliers. Pero volvamos al principo.
Las finales empezaron en el Oracle Arena ya que los Warriors habían sido los primeros en la temporada regular, haciendo la mejor temporada de la historia. Por esto nos esperaban dos partidos en Oakland que, como era de esperar, ganaron los Warriors y se pusieron liderando la final 2-0.
En el primer partido los de la bahía se impusieron 89-104 con las actuaciones destacables de Livingston e Iguodala. El segundo encuentro fue 77-110 con unos Warriors que hacían lo que querían y unos Cavaliers que brillaron por su ausencia.
Nos trasladamos ahora a Cleveland, Ohio. El Quicken Loans Arena iba a ser el lugar donde los Warriors podían dar un golpe en la mesa, y así fue. A pesar de que el primer partido acabó 90-120 con unos espectaculares Cavaliers y un enchufadísimo LeBron, en el cuarto partido los Warriors se hicieron con el factor cancha con un Curry que hizo 38 puntos y un marcador de 108-97. Todo parecía decidido, pero nada de eso.
Con un 3-1 para Golden State y el próximo partido en casa parecía que iban a ganar por segundo año consecutivo el anillo para ponerle el broche final a una temporada de récord. Pero LeBron James se iba a encargar de que eso no fuera así. El quinto partido acabó con la victoria de Cleveland Cavaliers por 112-97, donde se notó en el quinto partido la baja de Green por sanción. En este encuentro LeBron James y Kyrie Irving consiguieron otro récord de las finales al hacer nada más y nada menos que 41 puntos cada.
En el sexto partido los Cavaliers ganaron 101-115 con un LeBron que hizo de nuevo 41 puntos y una magnífica actuación de todo el equipo. Stephen Curry fue expulsado por hacer 6 faltas y lanzó su protector bucal contra un espectador.
Al acabar los 6 primeros partidos, LeBron James lideraba la final en puntos, asistencias, tapones y rebotes y si sumamos todos los puntos de ambos partidos, ¡obteníamos un empate a 610 puntos! Esto era una prueba de como iba a ser el último partido de la temporada.
El séptimo partido se caracterizó por la baja anotación debido una defensa inquebrantable de los Cavaliers que obligó a los Warriors a recurrir a los triples, y al gran número de errores desde la linea de tres de los Cavaliers que iban sumando de 2 en 2. El resultado al descanso fue de 42-49 pero no solo llevaban 5 puntos de ventaja los Warriors, sino que las sensaciones eran muy favorables para el conjunto liderado por Stephen Curry, que al igual que LeBron, aparecía y desaparecía del partido por momentos. El tercer cuarto fue todo lo contrario a la primera mitad ya que la defensa de ambos conjuntos empezó a fallar y se desató durante 12 minutos la fiesta de anotación. Al comenzar los últimos 12 minutos de la temporada, los Warriors ganaban 76-75. El comienzo del cuarto transcurrió con normalidad hasta que los dos equipos decidieron que el otro no iba a anotar más, y durante 5 minutos el parcial fue de 3-2, destacando un tapón de LeBron a Iguodala que hizo que el marcador siguiera 89-89.
1:09 para el final del partido. 89-89. Posesión para los Cavaliers. Kyrie Irving recibe el balón en la linea del tres y se juega el triple tirando por encima de la mano de Stephen Curry. Chof. Quedaban 55 segundos y el anillo estaba a tiro para los de Cleveland. En la posesión para los Warriors, Curry se juega el triple y falla, provocando así una contra de los Cavaliers que terminó con una falta a LeBron, que nos asustó a todos doliéndose de la muñeca. Encestó uno de los 2 tiros y puso el 93-89 final en el marcador.
Final del partido. Clevaland Cavaliers ha conseguido su primer anillo y remontando por primera vez un 3-1 en contra en toda la historia de la NBA. Todo esto manos del hijo pródigo, el elegido, The King, que rompió a llorar sobre la cancha en el instante en el que acabó el encuentro, porque volvió para esto. Enhorabuena campeones, os lo merecíais.
Redactado por Jorge Silva (@JorgeSilvaBou)
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