Sevilla 1-0 Espanyol: Nervión se queda a las puertas

Un gol de Diogo Figueiras en el 89' dio esperanzas a los hispalenses que no pudieron consumar la remontada. Un Espanyol muy sólido mantuvo el marcado y jugará las semifinales

Sevilla y Espanyol disputaban la vuelta de los cuartos de final de Copa del Rey en el Sánchez-Pizjuán. Los de Nervión partían con un 3-1 en contra y habían preparado una olla a presión para recibir a su rival. La polémica estaba servida después de que los aficionados del Espanyol movilizados no contaran con la ubicación habitual para las hinchadas visitantes.

El planteamiento inicial del comienzo fue el esperado. Un Sevilla muy intenso buscaba el gol rápido que dejara tocado a su rival y acercase la clasificación. Los pericos esperaban a su rival en campo propio conscientes de que cuanto más tardase el equipo hispalense en marcar más opciones tendrían de sentenciar. Sin embargo pronto pudo llegar el primer gol visitante cuando Arbilla estrellaba en la cruceta un libre directo en el minuto uno.

Pasaron los minutos y las tentativas del Sevilla por adelantarse se hicieron cada vez más imprecisas. Un Espanyol muy cómodo a la contra tuvo una mayor sensación de peligro. El cansancio comenzó a hacer mella en los hombres de Unai Emery y la distancia entre líneas se amplió para alegría del conjunto perico que había evitado las embestidas locales y veía como las opciones de adelantarse eran reales. Acabó así la primera parte.

Unai Emery buscó la intensidad y las entradas por la banda para el inicio de la segunda parte, para ello entraron Banega y Figueiras. Se reanudó el partido y el Sevilla buscó con una intensidad renovada abrir el marcador. El Espanyol contaba sus contra con los dedos de las manos pero seguía muy cómodo en defensa. Sergio González realizó sus cambio y con Stuani y Colotto buscó el trabajo para evitar la única opción del Sevilla, las entradas por banda.

El Sánchez-Pizjuán fue testigo de un ejercicio destacado defensivo del Espanyol, una pared en la que los ataques hispalenses morían una vez tras otra. Sin embargo en el 89' ante la imposibilidad de superar la muralla, Diogo Figueiras vio adelantado a Pau desde la frontal y sin pensárselo dos veces conectó un disparo cruzado perfecto que se coló por la escuadra inalcanzable para el guardameta del Espanyol.

El Sevilla estaba a un solo gol de clasificarse y disponía de tres minutos para conseguirlo, pero el Espanyol no se doblegó y consiguió llegar al final del partido con el 1-0.

Los pericos se clasifican así para semifinales donde se enfrentarán al Athletic Club que superó en su eliminatoria al Málaga.


Alberto. @SiempreRamosSi