LEYENDA | Ronaldinho: La Samba brasileña

Una leyenda que continúa muy presente en el alma de los futboleros

Ronaldinho era ese tipo que cuando cogía el balón hacia tanta magia que eclipsaba a cualquier jugador que estuviera en el campo, tanto es así, que en un Real Madrid - Barça, el público blanco, aplaudió a la estrella blaugrana.

Tras debutar en Gremio, se fue haciendo un nombre, tanto es así que llamó la atención de los grandes europeos, tanto es así que en 2001 fichó por el PSG, y poco después por el Barça, donde su nombre quedaría grabado en oro.

En 1998 debutó con Gremio, y poco después en 1999, debutó con la selección de su país natal, Brasil.

Era una joven promesa cuando surco el océano atlántico rumbo a París, donde dejó su nombre a 17 goles en 55 partidos.

Después de 24 goles en Gremio, y 17 goles en el PSG, tras 107 partidos como profesional, fichó por el club de la capital condal, donde ganó el respeto de afición, y rivales.

En 2005 tras unas grandes temporadas en Brasil, y en París, después de fichar por el Barça, ganó su primer y único balón de oro.

Después de 72 goles en el club catalán,y de jugar con Leo Messi, fichó por el AC Milán, donde su rendimiento ya estaba decayendo poco a poco, y nada pudo hacer para remediarlo, sin control iba hasta un fútbol mediocre, pero aún así seguía siendo aquel jugador joven que movía el balón con clase, porque la clase se lleva en la sangre, aunque fuera ya mayor, tenía sangre.

Tras su etapa por Italia, se marchó a su país de origen, donde el Flamengo quiso recuperar su magia brasileña, tras una temporada de pocos goles, cambio de club, yendo a uno de los mejores clubes brasileños, el Atlético Mineiro.

Tras irse del Flamengo al Atlético Minero, "Gaucho" abandonó el fútbol brasileño para embarcarse en un nuevo fútbol, el Mexicano, en Querétaro, donde dejó 8 goles, y 8 asistencias.

Tras abandonar el fútbol mexicano, volvió a su tierra, pero esta vez al Fluminense.

Tras muchos partidos, y muchos goles (324), donde dejó la marca de la samba brasileña por cada campo que el brasileño pisaba, ganó ligas y campeonatos con sus diferentes clubes (Gremio, PSG, Barça, Milán, Flamengo, Atlético Mineiro, Querétaro, Fluminense), pero ganó títulos en todos los clubes menos en el Fluminense, con su selección, Brasil, también ganó muchos títulos, entre ellos, el mundial de 2002.

Tantos clubes, tantos partidos, tantos goles, hacen de Ronaldinho uno de los mejores jugadores de nuestro pasado tan reciente.